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Salud

Tiroiditis de Hashimoto: La enfermedad que padece la modelo Gigi Hadid y que reveló para poner fin a las críticas sobre su cuerpo

Esta patología afecta al metabolismo, el mantenimiento de funciones corporales e, incluso, el estado de ánimo y funciones cognitivas, debido a que ataca a la glándula tiroides, estructura orgánica esencial para casi todos los sistemas del cuerpo.

Unos tres millones de personas en Chile padecen algún trastorno de la glándula tiroides, siendo la enfermedad de Hashimoto una de las causas más comunes de hipotiroidismo.

Así lo muestra la Encuesta Nacional de Salud 2016-2017, cuyos datos arrojan que alrededor del 18.6% de la población mayor de 15 años podría tener hipotiroidismo, patología frecuentemente relacionada con la tiroiditis de Hashimoto. ​

Esta enfermedad ha cobrado notoriedad en los últimos días, luego que la modelo estadounidense Gigi Hadid decidiera revelar que la padece y, de esta forma, aplacar las críticas que ha recibido sobre su cuerpo.

“Para aquellos que están tan decididos a explicar por qué mi cuerpo ha cambiado a lo largo de los años, es posible que no sepan que cuando comencé a los 17 años todavía no me habían diagnosticado la enfermedad de Hashimoto», escribió en sus redes sociales la joven de 29 años.

Según explica el doctor Pablo Herrera, inmunólogo de Clínica Las Condes, “la tiroiditis de Hashimoto es una enfermedad autoinmune que afecta a la tiroides; es decir, es el propio sistema inmunológico el que ataca la glándula tiroides, generando una inflamación crónica de la glándula y afectando su función de la tiroides”.

En el caso de la enfermedad de Hashimoto, el especialista detalla que “los síntomas pueden no aparecer en etapas tempranas, pero a medida que la enfermedad avanza, usualmente producen fatiga, aumento de peso, sensibilidad al frío, estreñimiento, piel seca, caída del cabello, depresión y problemas de memoria”.

Principales funciones de la tiroides

Aunque es una pequeña glándula con forma de mariposa alojada bajo la laringe, la tiroides “es clave para el buen funcionamiento de casi todos los sistemas del cuerpo”, subraya el doctor Herrera.

Entre sus funciones, están:

  • Regulación del metabolismo: Las hormonas que produce la tiroides controlan la velocidad en que el cuerpo usa la energía, es decir, el metabolismo. Al influir en cómo las células convierten el oxígeno y las calorías en energía, la tiroides afecta procesos como la digestión, el ritmo cardíaco y la temperatura corporal.
  • Crecimiento físico y desarrollo cerebral en niños y adolescentes, por lo que un déficit de estas hormonas en etapas críticas del desarrollo debe ser tratado para evitar que el menor no crezca adecuadamente o presente retrasos cognitivos.
  • Mantenimiento de funciones corporales: Dado que las hormonas secretadas por la tiroides ayudan a mantener un adecuado equilibrio de la energía y a controlar la sensibilidad del cuerpo a otras hormonas, deficiencia de estas puede provocar afecciones al corazón, el sistema digestivo, los músculos, y el sistema nervioso central.
  • Influencia en el estado de ánimo y la función cognitiva: Debido a que impactan en el correcto funcionamiento del sistema nervioso, déficit de hormonas tiroideas pueden significar problemas de memoria y falta de concentración, así como cambios en el estado de ánimo, tales como depresión o ansiedad.

Debido a su rol crucial, el doctor Pablo Herrera afirma que “debe ser parte de los controles médicos anuales que las personas debieran hacerse, sobre todo en los grupos de riesgo, que son los niños y adolescentes, y las mujeres, especialmente entre los 30 y 50 años”.

“La tiroiditis de Hashimoto es más frecuentes en mujeres que en hombres, pero eso no significa que no se deba estar atento. Con un simple examen de sangre, en que se miden los niveles de hormona estimulante de la tiroides (TSH), hormonas tiroideas (T4 libre y T3), y la presencia de anticuerpos antitiroideos, una persona puede saber si su tiroides está funcionando adecuadamente. Y en aquellos casos en que vemos este tipo de patologías autoinmune, si bien no tienen cura, sí se pueden tratar de manera sencilla y, de esta forma, impactar en menor grado en la vida de una persona”, sentencia el profesional.