Ya se acerca el fin de año, y con ello cenas, reuniones familiares y eventos que se planifican previamente con el objetivo de tener las mejores preparaciones para festejar juntos en esta fecha. Sin embargo, estas situaciones traen consigo ansiedad y exceso de estímulos que potencian los deseos de comer en grandes cantidades. Frente a esto, la psicóloga de Clínica Las Condes, Marcela Gallegos explica por qué surgen los atracones y cómo alimentarse conscientemente.
El 2022 está llegando a su fin y no son pocos los eventos que se organizan en esta fecha. Tanto navidad como año nuevo concentran la preparación de grandes volúmenes de comida y refrescos, lo que puede producir pensamientos ligados a la ansiedad y posteriormente a la culpa.
Los atracones se definen como consumir cantidades extraordinarias de alimentos durante una comida y sentir que el comportamiento alimentario está fuera de control. Puede surgir debido a situaciones de ansiedad/estrés y dietas muy restrictivas. Se presentan como situaciones donde la persona siente la necesidad de comer en grandes cantidades en un tiempo acotado, aún cuando no se tiene hambre. Si esta conducta es frecuente, es decir, si se presenta al menos una vez a la semana durante 3 meses, cumple con los criterios de Trastorno por Atracón, como un tipo de Trastorno de la Conducta Alimentaria (TCA) que puede asociarse a aumento de peso (por la cantidad de comida ingerida) y desencadenar en bulimia cuando hay conducta compensatoria posterior al atracón.
“Los atracones se define como ingerir gran cantidad de comida en un corto periodo de tiempo, por ejemplo, en dos horas, con sensación de pérdida de control, que es una sensación de que no puedo parar y posteriormente malestar tanto físico como emocional. Después de un atracón hay sensación de culpa, vergüenza y frustración” destaca Marcela Gallegos, psicóloga de Clínica Las Condes.
¿Por qué surgen los atracones?
Son muchas las personas que sufren atracones de comida por ansiedad. Visto muchas veces como un problema de debilidad mental, lo cierto es que es consecuencia de una dinámica más compleja de lo que parece. Pues con ello surge la sensación de culpa, irritabilidad y tristeza, lo que pueden desencadenar en un TCA.
Según la especialista, los atracones surgen generalmente a raíz de la restricción, “de hecho hacer una dieta es el principal predisponente a tener atracones. Existiendo diferentes formas de hacer dieta, por ejemplo, pasar muchas horas sin comer, saltarse comidas, evitar cierto tipo de alimentos o restringir la cantidad total de calorías ingeridas, las mismas dietas hipocalóricas son un ejemplo de ello. Cuando restringimos la cantidad total de calorías o nos saltamos comidas, esto va a hacer que lleguemos a la próxima comida con una sensación de hambre voraz y ante esto es común que tengamos más impulsividad al comer y que haya menos planificación”.
Otra razón por la que surge este tipo de trastorno es a raíz de la incorporación de “reglas” en la alimentación mediante alimentos prohibidos. Por ejemplo, al evitar el azúcar y comer algo que incluya este ingrediente, se crea esta mentalidad todo-nada, se rompe la regla y generalmente el consumo es en mayor cantidad porque existía una sensación de provocación física y psicológica
“Los atracones alimenticios también surgen porque gestionamos alguna emoción a través de la comida, como buscar calma, alivio, confort o escape”, agrega la psicóloga.
Precauciones para la cena de navidad y año nuevo
Es común que existan ciertas expectativas con relación a las cenas de fin de año, y eso puede causar o promover pensamientos ligados a la ansiedad. “Si por ejemplo pensamos que voy a juntar hambre para la noche, o voy a comer poco durante el día, es probable que tengamos un atracón después porque vamos a sentir sensación de hambre. De igual forma si pensamos voy a aprovechar de comer en esta cena de navidad todo lo que me prohíbo porque el lunes empiezo la dieta, es probable que haya un atracón porque sentimos como si fuera la última vez que podemos comer. Ante esto es importante observar cómo llegamos a la cena de navidad y con qué expectativas porque eso va a determinar cómo va a ser nuestra ingesta en la cena”, destaca Marcela Gallegos.
En relación con lo anterior, surgen algunas recomendaciones para tener en cuenta durante ambas festividades y sus respectivas cenas:
- Abandonar la mentalidad de dieta y restricción.
- Evitar el hecho de dar valor moral a la comida al clasificarla como algo bueno o malo, pues esto crea la sensación de culpa. Es recomendable tener elecciones flexibles y conscientes a la hora de comer.
- Escuchar las señales de hambre y saciedad, entender que el hambre no es un enemigo al que se le debe engañar, sino como una señal que indica si es necesario comer o no.
- No comparar las señales, estas son personales.
- No comparar las elecciones que cada cual hace en sus platos, esto añade ansiedad.
- Comer con regularidad estos días, no restringir previamente ni saltar comidas.
- Conectar con la sensación de satisfacción al comer.
¿Qué hacer luego de un atracón alimenticio?
Luego de enfrentar una situación de angustia y ansiedad tras un atracón alimenticio, es recomendable no compensar lo ocurrido con ejercicio extremo o a través de la restricción de comidas. “Es recomendable evitar el chequeo del cuerpo con espejos, pesas o medición. Usar ropa cómoda, dar tiempos de descanso, evitar la crítica o la culpa. Ser autocompasivos con nosotros, amables en momentos de malestar. Hablar con alguien de confianza para expresar como nos sentimos. Y por sobre todo, recordar que si este malestar emocional y físico se presenta de forma frecuente se debe consultar con algún profesional especializado en el área”, agrega la psicóloga Marcela Gallegos.
Crédito de Fotografía: https://www.google.cl/amp/s/www.fitguru.training/lifestyle/Atracones-navidenos-consejos-practicos-para-cuidarse-antes-de-las-fiestas-de-fin-de-ano–20211126-0016.html
