Los jóvenes y sus familias recibirán los montos adeudados desde 2020 para el pago de los aranceles, lo que permitirá continuar sus estudios con tranquilidad.
253 estudiantes de la comuna podrán continuar estudiando, luego de que el Municipio de Coquimbo pagara cerca de 80 millones de pesos en deudas correspondientes a aportes de estudios superiores, entregados a través de la Dirección de desarrollo Comunitario, y que se arrastraban del año 2020.
Debido al retraso en el pago, las familias debieron cubrir con sus recursos los dineros no cancelados por el municipio para desbloquear la toma de ramos o el pago de matrícula.
Por ello era vital para la actual administración municipal cumplir con este compromiso adquirido con cientos de familias coquimbanas beneficiadas con esta beca. Así lo expresa el alcalde de Coquimbo Ali Manouchehri quien percibe como una injusticia que estudiantes que obtuvieron correctamente este beneficio, vieran perjudicados la continuidad de sus carreras profesionales y estar preocupados de conseguir dinero para pagar los aranceles y no focalizados en sus estudios.
«Empatizamos con la preocupación y la inquietud de estas familias, que veían incierto el futuro académico de sus hijos, debido a que nuestro municipio no cumplió con la ayuda comprometida. Es por ello por lo que, acorde con nuestra política de responsabilidad y orden financiero, decidimos sanear esta deuda, lo que permitirá a cientos de jóvenes de nuestra comuna, estudiar más tranquilos y a sus familias, ver con mayor optimismo, su futuro académico y laboral”.
PRIORIDAD EN BENEFICIOS ESTUDIANTILES
“Obtuvimos el beneficio el año 2020 y el 2021, pero no habían sido cancelados y la universidad nos preguntaba cuando estarían los pagos, por lo que tuvimos que usar nuestro IFE para cubrir los dineros y para que mi hijo pudiera tomar ramos”. Este es el relato de Juan Tapia, padre de Gabriel, estudiante de cuarto año de Educación Física en la universidad Santo Tomás, quien este 2022 recibió, luego de una larga espera, los dineros adeudados.
El joven, que presenta condición de discapacidad, ha sido beneficiado desde el año 2020 con esta beca entregada por la DIDECO. El arancel de la carrera es de $2.700.000, a esta cifra se le realiza el descuento por la Beca Juan Gómez Milla quedando un arancel mensual de 150 mil pesos, pero con el aporte municipal de aproximadamente $500.000 debían pagar mensualmente $90.000.
“Yo trabajo embarcado y me pagan de acuerdo con los viajes que hago como observador científico, pero por la pandemia las salidas disminuyeron, así que el dinero es escaso. Nosotros somos una familia de clase media, pero de esfuerzo y el retraso en el pago del municipio, significó que tuviéramos que utilizar dineros que teníamos reservados para poder vivir, al pago de la universidad porque Gabriel no podía tomar ramos o matricularse”, detalla Juan.
Es conocido que el Municipio de Coquimbo, debido a la deuda de arrastre que recibió la actual administración, que supera los 40 mil millones de pesos, se encuentra en medio de una crisis financiera. Sin embargo, esta situación ha motivado planes de austeridad, orden financiero, ahorro y manejo de finanzas que ha permitido ir organizando los ingresos y egresos y de esta manera, responder a los compromisos adquiridos. Es así como se han pagado deudas tanto con pequeños proveedores locales a quienes se les han cancelado más de $500 millones en deudas de arrastre, como las becas para los estudiantes de Coquimbo.
En detalle, los dineros adeudados en este beneficio estudiantil del 2020 y del 2021 han sido cancelados completamente con un primer pago de $15.000.000, a fines del 2021, beneficiando a 10 personas; un segundo pago, entre enero y febrero del presente año, correspondiente a $36.000.000 de becas impagas de 139 estudiantes y se encuentra en proceso el pago de $29.350.000 que corresponden a 104 estudiantes.
SACRIFICIO FAMILIAR
Carolina Suazo Rojo está en quinto año de nutrición y dietética en Inacap y recibe una beca municipal de $400.000 anuales desde el año 2019 que le permite pagar el arancel de su carrera. Su madre es discapacitada y su padre trabaja en la feria, por lo que necesitan imperiosamente de la ayuda municipal. Sin embargo, el 2020 el municipio no pagó esta deuda, situación que se repitió el 2021.
“Cuando iba a consultar si se había hecho el pago, INACAP me informaba que no, y entonces debimos poner el dinero nosotros, porque no podía matricularme y tenía que seguir estudiando. Mis padres tuvieron que reasignar los dineros, mi mama es pensionada en situación de discapacidad y mi papa trabaja en la feria y fue un gran esfuerzo tener que pagar estos dineros para que yo pudiera seguir estudiando”, relata Carolina.
Es por ello que la joven destaca que «este beneficio ayuda muchísimo porque tengo beca Mineduc y una de Inacap. La situación que estamos viviendo es muy complicada y cada vez es más difícil distribuir los dineros para tener que pagar el beneficio que le correspondía al municipio”.
Tanto para Juan como para Carolina, las cosas cambiaron cuando se les informó, que los pagos retrasados serán ingresados directamente en sus casas de estudio y que les permitirán realizar descuentos en sus aranceles para este año 2022.
“Todos trabajamos para que nuestros hijos tengan logros, pero estos eran compromisos adquiridos, y el que no pagaran nos afectó. Entendemos la situación financiera de la municipalidad y nos pone contentos que, a pesar de lo complicada situación financiera de la municipalidad, comenzaran a cumplir sus compromisos y lo hicieran primero con los estudiantes de la comuna”, concluye Juan Tapia.