El emprendimiento que comenzó como un algoritmo para mejorar la producción de harina de pescado, rápidamente escaló a otras industrias, con un éxito que los tiene trabajando en su internacionalización y en el lanzamiento de nuevos servicios.
Madeleine Valderrama e Ismael Valenzuela son los fundadores de Altum Lab, startup creadora de la plataforma web Boss, la cual se dedica mediante modelos matemáticos e inteligencia artificial a la optimización de mezclas de productos no homogéneos. Gracias a este software de fácil acceso, esta compañía logró un alto nivel de asertividad en la industria de la harina de pescado, demostrando en poco tiempo que es completamente aplicable para mejorar y optimizar todo el proceso productivo en muchas otras áreas económicas.
En sus inicios, Altum fue incubada por Imagine Lab, cuyo fondo Corfo les permitió a estos socios dedicarse 100% al emprendimiento. Posteriormente, el fondo de capital de riesgo Devlabs creyó en su innovación y les ayudó a posicionar a Boss en otras industrias. Asimismo, en diciembre pasado, cerraron una ronda de inversión, gracias a la cual levantaron tres fondos mexicanos y uno norteamericano por 400 mil dólares. “Fue algo completamente impensado para nosotros y representa la oportunidad de expandirnos en Latinoamérica, con foco en Chile, Perú y México, donde creemos que podemos agregar valor rápido en industrias que ya conocemos: minería y de alimentos”, expresa la cofundadora y CEO de Altum Lab.
Esta startup nació en 2017 enfocados en las mezclas de harina de pescado, debido a que Madeleine había trabajado más de cinco años en dicho sector. Ahí se dio cuenta de que, así como en otras actividades, existe una discusión eterna por la rentabilidad entre las áreas comercial y productiva, que ella junto a su socio ayudó a solucionar con Boss. La Compañía Pesquera Camanchaca fue su primer cliente y quienes verificaron las mejoras que proponía este innovador software, “con la plataforma logramos aumentar entre 15 a 20% del valor del stock, sólo mediante la optimización de las mezclas”, comenta Madeleine Valderrama.
Al poco tiempo, Altum Lab amplió su mercado para lo cual apostaron por la industria de la minería y los alimentos. “Nos dimos cuenta que Boss era aplicable a muchos sectores productivos, como la industria química, celulosa y rendering, entre otros. En 2019 ganamos un concurso para trabajar con CAP y en Perú comenzamos con un cliente enorme, que es el Grupo Romero, ambos fueron un salto de confianza para nosotros, porque veníamos de otra área”, indica la ejecutiva.
2020, en tanto, fue un gran año para ellos, pues aumentaron sus clientes debido a la mayor preocupación de las empresas por mantener y mejorar su productividad durante la pandemia. Adicionalmente, descubrieron que con la información que logran recopilar de las gerencias pueden agregar un alto valor estratégico, simulando escenarios de inversión con un menor costo y tiempo de implementación. Este nuevo módulo que apunta al Asset Performance + Asset Investment + Plan estratégico ya está operativo.
En los próximos meses, trabajarán fuertemente en la internacionalización de Altum Lab en la región, “donde todos los países son productores de materias primas, por lo tanto dependen más de la variabilidad y cuentan con menos tecnología”, indica. En esta misma línea, la ejecutiva agrega que en general las empresas de América Latina tienen data, sin embargo no saben cómo usar esta información a su favor.
En la trayectoria de este emprendimiento, Madeleine Valderrama destaca dos hitos importantes: cuando fuimos incubados por Imagine Labs y el apoyo de Devlabs, “que con su visión de largo plazo, sus redes y entendiendo el riesgo de una startup que está creando un producto que no existe en el mercado, y los desafíos que eso conlleva, nos ayudaron con el posicionamiento e incluso a definir el mensaje que queríamos transmitir, todo desde un perfil más humano, lo que es muy difícil de encontrar en Chile”, puntualiza.
