Si bien la comuna de Vicuña posee pocos contagios y la Pampilla no generará un gasto financiero extra en las arcas municipales, aún no es una decisión tomada y depende de la situación país.
Un escenario complejo ha generado la pandemia del coronavirus en diversos ámbitos, desde el simple hecho de salir al trabajo, debido al recorte de empleos, la baja producción económica y las restricciones de reuniones sociales. En este sentido, la región de Coquimbo se caracteriza por celebrar las fiestas patrias con las tradicionales “pampillas”, siendo las más concurridas y reconocidas a nivel país las de Vicuña y la de Coquimbo.
Si bien la fiesta de la ciudad puerto ya fue anunciada durante la semana que se suspenderá este 2020, para este año la realización de la “Pampilla de San Isidro” aún se encuentra en análisis, básicamente esperando saber la situación país que estaremos viviendo en ese entonces y también porque la municipalidad de Vicuña no necesita de esa inversión para otras acciones sociales, como si lo necesita Coquimbo, pues la “Fiesta Criolla del Valle del Elqui” se ha autofinanciado los últimos años.
Sin duda que la Pampilla de San Isidro es el evento social “dieciocheno” por excelencia en el Valle de Elqui, pero en la actualidad la realización de este magno evento se ve amenazado por las restricciones que trae consigo el avance del Covid-19 en el país. Para las autoridades poder decidir su realización es clave, pues el evento requiere de toda una preparación logística y de diversos recursos.
El alcalde de Vicuña, Rafael Vera Castillo manifestó la complejidad social de realizar el evento, a pesar de que existan los recursos. “La verdad es que la Pampilla de San Isidro se financia por si sola, no es un problema económico, nosotros no dejamos de destinar recursos sociales por hacer este evento, pues esta se financia sola. El problema aquí es poder visualizar un tema complejo de salud pública”.
La pandemia del “coronavirus” ha puesto en alerta, entre otros ámbitos, al sistema de salud del país. La disponibilidad de insumos médicos y el personal capacitado no da abasto si la pandemia no se controla a tiempo, a consecuencia, realizar un evento como este podría traer complicaciones mucho más graves para toda la ciudadanía, como múltiples contagios y saturación de la red asistencia, especialmente en comunas tan pequeñas como Vicuña y Paihuano.
Para las autoridades es difícil prever este posible escenario, pues las cuarentenas totales se están recién decretando. El jefe edilicio de la comuna elquina, Rafael Vera, proyecta en esta misma línea, el hecho de no poder realizar la pampilla por las condiciones del contexto futuro. “Yo me imagino que a esa fecha las autoridades del país, no van a permitir hacer actividades que aglomeren una gran cantidad de gente, ante eso veo poco probable la realización de la pampilla. Sin embargo, no lo descarto, pues aún hay que ver como se sigue dando este tema del coronavirus, pero definitivamente va a ser difícil que a esa fecha se vaya a juntar una gran cantidad de gente”.
Es importante resaltar que en los casos vecinos en la Región de Coquimbo, la pampilla del parque recreacional Los Peñones en Ovalle ya fue suspendida por concejo municipal de la capital del Limarí; mismo caso en la comuna de Coquimbo, donde la denominada “Fiesta más grande de Chile” también fue suspendida para su versión 2020 por el cuerpo colegiado de la ciudad puerto; en el caso de La Serena, las celebraciones realizadas en Quebrada El Jardín y Parque Coll aún están pendientes de suspensión, tal como sucede en Vicuña con la “Pampilla de San Isidro”.